Always & Forever: Paloma

Veréis, mi historia con One Tree Hill empezó hace 7 años cuando yo tenía 12 años más o menos, recuerdo que estaba en primero de la ESO y que cada tarde me sentaba en el sofá de mi casa con la tele encendida mientras yo hacía los deberes que me habían puesto. Y recuerdo que un día al encender la televisión vi que anunciaban que esa misma tarde estrenaban una serie llamada One Tree Hill así que dejé la cadena puesta y vi el primer capítulo.

Sencillamente, noté que algo tocaba mi alma, que algo cambiaba en mí. Noté que había algo especial en esa serie que merecía la pena ser escuchado. Y a partir de ese día seguí capítulo a capítulo la serie, primero por televisión y después por internet, pero a partir de ese día mi vida cambió y One Tree Hill siempre ha estado y estará presente en mí.

Han pasado 7 años y quedan 8 capítulos* para que finalice la mejor serie, según mi opinión, que ha existido en el mundo televisivo. Han pasado 7 años y he pasado de tener 12 a tener casi 19 y os puedo asegurar que yo no sería la persona que soy ahora de no ser por One Tree Hill, sin One Tree Hill sería una persona mucho peor. Porque he crecido con sus personajes y ellos han crecido conmigo, porque cualquier problema, duda o sentimiento que tuve en su momento One Tree Hill me ayudó a superarlo, porque he aprendido muchísimo sobre la vida gracias a esta serie, porque he aprendido a vivir gracias a One Tree Hill.

Y ya no es sólo toda la trama que contiene la serie que es fantástica, desde el amor verdadero de Nathan y Haley, las almas predestinadas de Lucas y Peyton, la fuerza para superar fronteras de Brooke y su al final encontrado amor Julian, y pasando por cada personaje, principal o secundario, que ha conseguido tocar mi alma con su historia (incluso Dan al que odie por haber matado a Keith pero que, aunque le siga odiando por eso, he aprendido a ver algo bueno en él), ya no es sólo eso. Sino todo el trabajo que se nota detrás de esa serie de producción y dirección, de vestuario, de escenarios, de guión y sobretodo de música.

Porque la música y la forma en que los personajes viven la música realmente me ha enseñado mucho, porque One Tree Hill está cargada de buena música, y fue por esta serie por la que hace 7 años descubrí a mi cantante favorito Gavin DeGraw. Porque One Tree Hill desprende magia en todos los sentidos desde cada palabra que dice cada personaje pasando por cada escena con su canción hasta llegar al hecho de que cada título de cada capítulo es el título de una canción de algún cantante.

One Tree Hill es magia pura y siempre la llevaré en mi corazón hasta mi último suspiro. Así que debo agradecer profundamente de corazón a todo aquel que ha hecho posible esta maravillosa serie. One Tree Hill acabará pero la magia que tiene quedará en nuestros corazones para la eternidad.

Paloma

(*)8 capítulos eran los que faltaban cuando Paloma nos envió su Always&Forever

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