Homenaje a las parejas de One Tree Hill: Nathan&Peyton

Nathan siempre supo que Peyton creía en él como persona, quizás por eso, ella le aguantaba todos sus desplantes y siempre estaba ahí cuando volvía y quizás también por ello, estas dos personas acabaron convirtiendo esa desastrosa relación de pareja en auténtica amistad.

Su tumultuosa historia tuvo sus inicios, durante la temporada estival cuando aún estaban en el instituto, siempre marcada por innumerables y sonadas rupturas, las cuales protagonizaba una pareja que se atraía pero que no se entendía.

Nathan era demasiado orgulloso y creído como para pararse a pensar en las necesidades de su pareja. Simplemente se preocupaba por sí mismo y por satisfacer sus deseos y necesidades, aun cuando eso significara herir a Peyton.

Él estaba por encima, y puede que tuviera ese pensamiento porque ella siempre estaba ahí por muy mal que la tratara, por mucho que le diera mil y un desplantes: como cuando la dejó tirada en la carretera al habérsele estropeado el coche y Lucas fue el encargado de ir a buscarla fomentando así el interés de este chico por la chica inalcanzable por la que su corazón latía cada vez mas.

La animadora deseosa de que su chico mostrara un mínimo de interés hacía ella.

Peyton resultaba ser la chica a la que nunca habríamos pensado ver agitando un pompón de no haber conocido su historia. La chica borde y solitaria, amiga de la capitana de animadoras y popular escondía su soledad a golpe de dibujos. Unos dibujos que reflejaban su estado de ánimo y sus pensamientos más profundos en su blog de internet.
Simplemente había que pararse a mirar y eso, era lo que Lucas hacía en lugar del chico a quien le correspondía: a su novio. Un novio que no dudó en “jugársela” al baloncesto en un épico uno contra uno jugado con Lucas para demostrar “quien mandaba” allí.

Este comportamiento hubiera hecho enfadar a cualquiera, a Lucas se le abrió la esperanza y a ella pese a marcharse con su pareja, se le abrieron los ojos al comprobar que estaba saliendo con un chico que no perdía oportunidad en besar y coquetear a otras chicas.

Lo que le movió a tener un affaire hasta con la mejor amiga de Peyton, algo que, cuando esta descubrió años después, supuso un antes y un después en su relación por lo que conllevaba en la relación Brooke-Peyton-Lucas.

Nathan conoció lo que significa amar a alguien a partir de su historia de amor con Haley y sólo entonces comprendió también, lo que supone que alguien te quiera. A partir de aquí, su relación de amistad fue totalmente sincera y amable, también porque Peyton no conoce el significado de la palabra rencor y le acogió con los brazos abiertos para ayudarle a sobrellevar la ausencia de Haley durante su gira musical. Se levantó como una protectora nata cuando esta regresó y se lo puso difícil para que luchara por él.

También él le mostró su apoyo cuando Peyton tenía a la soledad por compañera tras la marcha de Jake. Así también, él estaba ahí para ella, si lo necesitaba: no estás sola, ¿lo sabes verdad?-le dijo una vez en referencia a cuando Jake huyó con su hija y Peyton estaba desolada de nuevo, así ella le mostraba su apoyo dándole la opción de ser escogido por ella en el juego de la cita ideal.

Por ello se puede entender la sensación de que quiso “resarcir” a su primera novia agarrándose varias veces a la frase: “estábamos bien juntos” queriendo desechar los malos momentos y juntar todos los buenos en esas tres palabras las pocas veces que tiempo después había salido a colación en alguna conversación con está, sobre su tormentosa historia de amor. Y deseoso de que lo hubiera desterrado de su mente todo lo malo anteriormente acontecido. Ella, como mujer de carácter, siempre le replicaba y mostraba cuan equivocado estaba, recordándole la vez que se fracturó una mano al golpearla contra algo en un arranque de rabia en una de sus múltiples rupturas.

Pero Nathan no cesaba en su empeño de guardar un buen recuerdo del tiempo pasado juntos con frases como: Siempre sentiré algo por ti o me serviste de inspiración el verano que empezamos a salir… (En referencia a cuando ponía sus iniciales (P. S.) en cada pesa cuando subía de nivel)

Peyton posee un gran corazón que por diversas circunstancias la han hecho convertirse en una superviviente. No conoce el significado de la palabra odio y por ello muestra el cariño y el respeto que le guarda al que fuera su novio cuando el día del Toy boy le dice: ¡Te has convertido en el chico que sabía que podrías llegar a ser!
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Las experiencias vividas juntos hicieron que entre ambos surgiera la confianza mutua que era inexistente cuando eran pareja: e hizo que Nathan le confesara sus temores y miedos más profundos abriéndole su corazón sobre ser padre, el futuro suyo y de su familia, el accidente del día de su boda, su culpabilidad, la paz que sintió durante un microsegundo al saber que su madre podía haber muerto por ingesta de barbitúricos…

Como gran amiga que es, Peyton describía en sus conclusiones del día de la actividad de clase lo que había sido para ella aquella mágica hora: el descubrimiento de una persona totalmente nueva para ella: si no te pones en primer lugar alguna vez tengo miedo de que un día te despiertes y pienses en lo que podías haber sido.

El retrato final de Nathan frente al símbolo de los Ravens con los brazos en cruz sujetando dos balones de baloncesto en un gesto que relata lo que ella había conocido en esa hora y la gente necesitaría toda una vida en conocer: la gente cree conocer Nathan Scott y yo también lo creía, pero hoy he pasado una hora con él y he descubierto algo nuevo: Nathan no es un héroe, es un mártir.

A nuestro mártir no se le escapa que gracias a Peyton, aprendió lo que no hay que hacer si quieres cuidar una relación de pareja y a desterrar a ese chico cretino para siempre: Aquella hora le hizo recordar lo buena amiga que era, algo que no se había perdido pese al paso de los años y de las cosas que se había dicho y hecho.

Por momentos así, esta amistad merecía más, Varias han sido las veces que me he preguntado: ¿Por qué razón no se explotó más a lo largo de la serie?

Gracias a Marian